Velocidad de escape

“En la mayoría de mis relaciones me tendría que haber escapado antes. Siempre. No, no siempre. Sí, siempre”. Estas palabras de Tota, el indudable centro sobre el que gravita el documental de Carmen Torres, se vinculan con un contraplano científico: la velocidad de escape es la que un cuerpo necesita reunir para desprenderse de otro. ¿Por qué una ley física, trasladada al horizonte de las emociones, provoca tanto dolor?
En este documental sobre el amor y las relaciones lésbicas es sobre todo la cámara la que está enamorada de Tota, de su carisma y autenticidad. Carmen sigue a su ex amante y ahora amiga en el proceso de una separación y un duelo. En el camino, otros personajes y preguntas van apareciendo: indagaciones sobre las relaciones, la amistad, las familias heredadas y las elegidas. Al mismo tiempo, Velocidad de escape es una película sobre el hecho mismo de filmar y abrirse a la sorpresa incesante de un cuerpo, un rostro o una nube.