Fantasmas familiares

Hablar de fantasmas familiares es ir directo al corazón de una contradicción. Un fantasma introduce una dimensión espectral o siniestra en aquello que reconocemos como familiar. En los documentales reunidos en este programa lo familiar no necesariamente es siniestro (aunque hay visos de eso en películas como The Quiet Noise), pero sí hay ausencias, huecos por llenar, heridas por subsanar, legados para corregir y seguir adelante transformados. Lo familiar no se circunscribe al ámbito de la familia, sino que se extiende a aquello que podemos llamar “lo conocido” (un país, una comunidad de origen, una identidad, un paisaje), y sobre lo que (como ocurre en documentales como Cruz) se cierne una amenaza. 

Coinciden aquí trabajos que persiguen un registro autobiográfico como El árbol de Matías u Objetos rebeldes, con denuncias urgentes, reencuentros, revelaciones. Las indagaciones sobre las memorias familiar y comunitaria y las preguntas por los huidizos soportes en los que estos recuerdos se inscriben, surgen orgánicamente, y ofrecen respuestas parciales a un desafío general: ¿en qué punto se entrecruzan lo personal, lo familiar y lo social y cómo puede el cine crear memorias comunes?

Texto por: Pedro Adrián Zuluaga